Poesía Invitada
Soy una ferviente enamorada de la poesía de Nicolás Guillen, quien fuere impulsor más importante del ciclo negroide del 1930, aquí, un soneto de mis preferidos, ya con un tono más moderno, seguiremos poniendo otros más adelante...
Rosas de Elegía
Hoy te miré pasar, con la arrogante
aristocracia audaz de tu desvío
cual si quisieras, en el pecho mio,
tornar más cruel la llaga torturante.
Yo, sin querer, soñé con el distante
amor feliz que se murió de frío
y en el dolor de mi jardín sombrío
se abrió la flor de otra ilusion amante
Sentí otra vez tu cuerpo perfumado
junto a mi pobre cuerpo abandonado
latir ardiente, como en otros días
Busqué tus manos y busqué tu frente
!y hallé tan sólo, dolorosamente,
la soledad de las tristezas mías!
Nicolás Guillen.
El libro de los Sonetos
Rosas de Elegía
Hoy te miré pasar, con la arrogante
aristocracia audaz de tu desvío
cual si quisieras, en el pecho mio,
tornar más cruel la llaga torturante.
Yo, sin querer, soñé con el distante
amor feliz que se murió de frío
y en el dolor de mi jardín sombrío
se abrió la flor de otra ilusion amante
Sentí otra vez tu cuerpo perfumado
junto a mi pobre cuerpo abandonado
latir ardiente, como en otros días
Busqué tus manos y busqué tu frente
!y hallé tan sólo, dolorosamente,
la soledad de las tristezas mías!
Nicolás Guillen.
El libro de los Sonetos
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